Claves de la prohibición del manos libres en Francia

En Francia están preocupados por el aumento de siniestros en las carreteras francesas, con un total de 3.388 víctimas mortales, un 5% más en 2014 con respecto al año anterior y el máximo en los últimos doce años.

Por eso, el gobierno ha preparado un nuevo plan de Seguridad Vial que contiene contundentes medidas como el aumento del número de radares o la disminución de la tasa de alcoholemia permitida entre los jóvenes a 0.2 g/l.

Pero la norma que más controversia ha causado, y que más tiempo se llevaba fraguando, ha sido la de la prohibición del uso al volante de sistemas de manos libres de auriculares, tanto los inalámbricos Bluetooth como los de cable. Por el contrario, los sistemas integrados en el vehículo quedarán fuera de esta prohibición.

Esta diferenciación sin embargo plantea una contradicción, pues si bien los sistemas integrados no exigen una manipulación física del aparato, sí suponen una pérdida de atención en la conducción que es, a la postre, la mayor amenaza con la que cuenta el conductor, según explica el Consejo Nacional de Seguridad Vial francés: “Muchos se imaginan que el peligro radica en la manipulación física del teléfono, el hecho mismo de sostenerlo en la mano, mientras que la amenaza proviene de la pérdida de atención. El manos libres introduce una fuerte carga mental adicional y reduces severamente la atención necesaria para conducir.”

Sin embargo, plantear una prohibición de estos sistemas integrados se antoja difícil debido a los fuertes intereses comerciales que existen, por lo que no se descarta en el futuro soluciones alternativas como limitar su uso en determinadas situaciones o introducir alertas de prevención.