Aeropuerto de Badajoz (2): Instalaciones e infraestructura.
FOTOS: AENA
Anteriormente ya hemos hablado del Aeropuerto de Badajoz, una infraestructura que cobra importancia en Extremadura debido a las características propias de la región (sobre todo su extensión y dispersión geográfica).
Hoy vamos a centrarnos más en el aspecto técnico del aeródromo, en sus características físicas y sus instalaciones. Ya hemos hablado de que Badajoz comparte torre de control con la Base Aérea de Talavera; estamos hablando de una pista de aterrizaje de 2.800 metros que, como también hemos comentado, fueron suficientes para que el avión supersónico francés Concorde aterrizara en el aeropuerto en 1989, algo que por aquel entonces pocos aeropuertos españoles se podían permitir.
El aeropuerto también cuenta, tras la ampliación realizada los últimos años (licitada en 2006 y finalizada en 2010), de dos plataformas para aeronaves de 30.000 m2 para aviación comercial y 5.000 m2 para aviación general, que permiten 6 y 15 posiciones de estacionamiento respectivamente.
Con la citada ampliación también ha visto aumentada su superficie la terminal de pasajeros, que pasó de tener 2.500 m2 a 4.400 m2, con 2 cintas de recogida de equipaje, 3 puertas de embarque y 7 mostradores de facturación. La ampliación ha permitido además contar una nueva zona de tránsito y una planta adicional para instalaciones técnicas, con una renovada fachada sobre la zona de embarque. Fruto de esa obra es también el nuevo párking, que ha pasado de tener 129 plazas a 245, todas ellas gratuitas.
Aunque en una licitación posterior de 2009 se realizaron las actuaciones de repavimentación de la pista de aterrizado y de la calle de rodadura hasta la plataforma civil, aún está pendiente la construcción de la nueva central eléctrica que surta de energía al complejo.
En cuanto a los accesos, al aeropuerto se llega a través de la carretera local BA-023 , que conecta Balboa con la antigua N-V con dos ramales, hacia el oeste dirección Badajoz y hacia el este dirección Talavera la Real (la localidad, no la base aérea). En sendos enlaces se han construido glorietas que facilitarán las incorporaciones; sin embargo, sólo el ramal oeste –dirección Badajoz– fue arreglado en 2007, quedando el otro –dirección Talavera la Real– en estado muy deficiente.
Precisamente a este respecto, la Consejería de Fomento ha mostrado recientemente su interés de ejecutar obras de rehabilitación y mejora de los accesos a las instalaciones de Badajoz – Talavera, con la intención de garantizar la seguridad vial de los usuarios y potenciar más aún la usabilidad y el aspecto del aeropuerto pacense.
En definitiva, estamos ante unas instalaciones ante todo útiles y funcionales, adecuadas al tráfico de pasajeros con los que cuenta la región; aunque siempre hay margen de mejorar y progresar, sobre todo con el objetivo de que conseguir un servicio más eficiente y atraer un mayor número de pasajeros de zonas próximas que aún hacen poco uso de él (provincia de Cáceres y Alentejo portugués, principalmente).
Ver: «El Aeropuerto de Badajoz (1): Pasado, presente y futuro»